
Title | : | Chamanes y robots |
Author | : | |
Rating | : | |
ISBN | : | 8433964445 |
ISBN-10 | : | 9788433964441 |
Language | : | Spanish; Castilian |
Format Type | : | Paperback |
Number of Pages | : | 184 |
Publication | : | Published October 16, 2019 |
Chamanes y robots Reviews
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Muy interesante todo el aspecto antropológico relacionado al efecto placebo (conseguiré su otro libro “Antropología del cerebro”). Cuando entra al terreno robótico pierde su encanto y no parece encajar tan bien los hilos de la argumentación, que terminan al aire.
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No me ha convencido del todo la idea que sostiene este ensayo, que el propio libro la resume así: "Los robots serán conscientes si un chamán del futuro, con el arte de la palabra, logra cautivarlos y se comprueba que son sensibles al efecto placebo". Evidentemente, esta frase simplifica demasiado el desarrollo de este ensayo, pero indica el gran problema que se enfrentan todos los teóricos de la conciencia: apenas hay pruebas para validar sus tesis. Por lo tanto, el libro —como otros del mismo tema— se adentra peligrosamente en la especulación y alumbra explicaciones sobre el exocerebro, los símbolos, el libre albedrío y, sobre todo, la conciencia. Y aquí es donde el lector tiene que echarle imaginación y tener buenas tragaderas.
Sin embargo, a nivel divulgativo resulta muy interesante, especialmente la primera parte, que trata sobre el efecto placebo y los chamanes. La segunda se centra en el transhumanismo y la robótica, repitiendo ideas que a día de hoy nos encontramos hasta en la sopa, aunque se siguen con facilidad.
Sugerente, eso sí. -
El autor sostiene una tesis que pretende demostrar y cotejar con otras a lo largo del ensayo: la consciencia humana es el resultado de la interacción entre el mundo simbólico cultural y el sustrato biológico sensible de nuestro sistema nervioso central.
A diferencia de las teorías fisicalistas que ponen la consciencia en el cerebro y sostienen que eventualmente va a ser posible replicar este sustrato y con ella la posibilidad de alcanzar una consciencia artificial o transponer la nuestra, esta teoría niega que esta técnica sea posible si ese cerebro no cuenta con lo que el llama un exocerebro, es decir, el conjunto de relaciones emocionales, culturales y simbólicas que tienen los seres humanos.
En el proceso de sostener esta teoría recorre dos conceptos claves: el efecto placebo y el efecto robótico. El efecto placebo (o su contrapartida, el nocebo) es la posibilidad de conseguir un efecto positivo o negativo mediante una sustancia que no tiene las propiedad instrínsecas de lograrlo. El efecto robótico es un poco menos claro y creo que refiere al hecho que una maquina es programable.
Mi opinión es que aún si la conclusión es correcta y algunas de las premisas están bien sustentadas, el razonamiento por el cual llega de unas a otras no es tan convincente y en el camino da algunos saltos que parecen infundados.
Una de los puntos que me parece más critico es que para ser un antropólogo sus afirmaciones parecen adolescer de un antropocentrismo inconsciente: "Un animal carente de lenguaje no puede saber que siente dolor: solamente lo sufre, pero no es consciente de ello". En el siglo XVII, Descartes decía que los animales eran autómatas y no sufrían y recomendaba la vivisección para estudiar los mecanismos de la naturaleza. Hasta hace un par de décadas esta idea era parte de nuestra curricula escolar que sacrificaba ranas para que un adolescente le diera un vistazo a los mecanismos misteriosos de la naturaleza.
La consciencia sufre un problema de atribución. No sabemos que es y no podemos estar seguros quién la tiene y quién no. Suponemos que el vecino la tiene porque se comporta parecido a nosotros y podemos comunicarnos con ellos pero ¿eso es suficiente para que un perro no tenga algún tipo o grado de consciencia? ¿cómo demostrarlo? Si un robot aparenta tener consciencia, ¿cómo sabemos que no la tiene?
Aún si Bartra tiene razón y la consciencia requiere un mundo cultural, tenemos problemas para definir que las relaciones que los animales establecen con el ambiente, aprenden y transmiten a otros animales no sea cultura.
Otro problema más grande que veo es que Bartra considera que el efecto placebo es una prueba de consciencia. Si podemos engañar a un robot para que crea que una sustancia inicua tiene una propiedad entonces es consciente. Para esto argumenta que dado que es necesario ser consciente para ser afectado por un efecto placebo porque en caso que uno ignore completamente que le están administrando supuestamente inocua, no va a funcionar. El problema allí es que un exceso de consciencia también destruye el efecto placebo y que lo que más que demuestra es que se necesita un cierto grado de consciencia pero no que sea la consciencia la que haga la transformación entre el mundo simbólico y el neurofisiológico. Justamente, hay todo un orden simbólico apenas considerado por la consciencia, eso que el psicoanálisis llama inconsciente.
Admito que aunque la teoría es interesante y el viaje divertido, como ensayo argumentativo no me convence pero sin lugar a dudas me empujó a reflexionar sobre el tema y eso es algo que siempre se aprecia de un buen libro. -
Pues bueno... Dos ensayos.
El primero contiene intuiciones interesantes sobre los placebos. Dos o tres líneas valiosas, en conjunto deja que desear por la poca rigurosidad, no por la falta de formalidad, sino por los desarrollos de las ideas. Me parece sospechosa la idea principal sobre la conciencia humana, este brote que surge de la interacción entre símbolo y cultura sobre los procesos aprehensivos del cerebro. Como si en un principio nuestra relación con el entorno fuera cultural. Me pregunto si los primeros homínidos encontraran en la naturaleza símbolos y cultura para sobrevivir... Su relación me parece haber sido una prueba y error, acto.
El segundo, más formal. Aunque me parece que más ridículo. Sobre el desarrollo antes planteado de la creación de la conciencia es aplicado a lo que sería una probable creación de la conciencia artificial. No hay mucho que decir por qué para mi ya parte de un error. Decir que sin habla no hay conciencia. Vaya... hay que ser muy limitado. -
Este bro me está ayudando con un proyecto. Es muy interesante la aplicación del concepto del "efecto placebo" y el "chamanismo" al mundo inmerso en tecnología. Uno deja de ver a los doctores como chamanes porque se presentan como científicos, pero tal vez sólo es un cambio de legitimación y de fe. Propone una hipótesis sobre la conciencia como fenómeno neuro-social que, además de ser útil para mi proyecto, fue muy entretenido entender. Recomiendo prestar especial atención a su idea del "exocerebro".
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Ensayo de reflexiones culturales acerca de la conciencia humana, conciencias artificiales y el efecto placebo. Aunque cae más dentro de los terrenos filosóficos y neurocientíficos, muchas veces se decanta a los terrenos de la CF.
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Este tipo se leyó todos los libros de divulgación de IA y luego hizo su interpretación (muy decente) sobre cómo podrían crearse robots conscientes, tomando como base su conocimiento de antropología, chamanismo y algunas cosas de neurología.
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Conceptos que no parecieran tocarse lo hacen en el entendimiento de la conciencia y la inteligencia artificial, el sueño de los posthumanos.
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Una nueva vuelta de tuerca a la posibilidad o imposibilidad de crear inteligencia artificial con conciencia de sí misma. La hipótesis del autor es que esto solo sucederá en el momento que comprobemos que el robot “sienta” un alivio al aplicarle un placebo, a la fecha, solo funcional en el ser humano. Un punto de vista interesante para la discusión.
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Excelente reflexión sobre el problema de comprender la conciencia humana y los desafíos en la construcción de formas de conciencia artificial.
No comparto ciertos conceptos del autor pero el ejercicio de pensamiento propuesto justifica plenamente su lectura, y es alimento para la comprensión del mundo en que vivimos.